Ir al contenido principal

Ir al menú de navegación

Bienal Internacional de Arquitectura

Ir al menú de navegación

Noticias

Así fue la segunda edición de Mugak/, una bienal más internacional y más cercana a la ciudadanía

  • Más de 45.000 personas participaron en el centenar de actividades y exposiciones de la segunda Bienal Internacional de Arquitectura de Euskadi en 2019.
  • Iñaki Arriola, consejero de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda, destacó que la pasada edición supuso la  “consolidación de Mugak/ como un referente internacional”.

Más de 45.000 personas participaron en el centenar de actividades y exposiciones que en 2019 se celebraron en las tres capitales vascas en el marco de la Bienal Internacional de Arquitectura de Euskadi Mugak/. El balance fue “francamente positivo”, según el consejero de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda, Iñaki Arriola, cuyo Departamento impulsa desde 2017 la iniciativa. El consejero celebró la “consolidación de Mugak/ como un referente internacional a la hora de debatir y reflexionar sobre la arquitectura contemporánea y su dimensión social y cultural”.

Mugak/ clausuró una segunda edición que se caracterizó por la profunda conexión que tuvo con la ciudadanía, como lo demostró “la salida a la calle de algunas de las propuestas, para acercar todavía más la arquitectura a la gente e incitarle a reflexionar”, explicó Arriola. Además, el consejero puso en valor la ampliación de la Bienal, que la anterior edición no solo se organizó en San Sebastián sino también en Bilbao y Vitoria, “una línea en la que queremos profundizar en el futuro”.

Asimismo, resaltó el valor de haber incorporado el patrocinio privado, que con su apoyo “configura un suelo muy sólido para futuras ediciones de la Bienal”. La pasada edición el éxito de público se tradujo en 45.000 asistentes, que superaron ampliamente las 30.000 personas registradas en la primera edición.

Exposiciones, conferencias, talleres, visitas guiadas y proyecciones cinematográficas exploraron las fronteras entre la arquitectura, el arte y la cultura. No faltaron los debates entre diferentes disciplinas con una participación muy activa de la ciudadanía.

La segunda edición se caracterizó por su calado internacional. Contó con nombres del mundo de la arquitectura contemporánea tan relevantes como Stephen Bates (Reino Unido), Sandra Barclay y Jean Pierre Crousse (Perú), Tatiana Bilbao (México), así como expertos como René Spitz, Klaus Klemp o Martin Mäntele (Alemania).

También acogió momentos estelares como los encuentros con los ‘pritzker’ Álvaro Siza y Rafael Moneo, y apuestas por acercar la arquitectura y la realidad de lugares tan culturalmente diferentes como China de la mano de Liu Yang y Ding Yao o Japón con Yoshihiko Ito. Se organizaron, en total, 52 conferencias o jornadas, con más de 115 conferenciantes durante sus dos meses de duración.

La clave local también tuvo su protagonismo, con el éxito de exposiciones como ‘Solar K’, en el propio Kursaal; ‘As Built-De la Hoz Fontán’, o ‘Parte Vieja y Puerto de San Sebastián: Conjunto Monumental’.

El debate tuvo como sede central el Instituto de Arquitectura de Euskadi (IAE/EAI) en San Sebastián, pero también se extendió a Vitoria y Bilbao. Se centró en el impacto social de la arquitectura y el urbanismo, con iniciativas como las sesiones celebradas en Bilbao sobre ‘Ciudades y cuidados’, la jornada organizada sobre Zorrozaurre, o la exposición ‘La vivienda transgeneracional’ en San Sebastián, que se preguntó con la ciudadanía cómo tendrían que ser los hogares para adaptarse realmente a las necesidades de la sociedad del siglo XXI.

Iniciativas como la réplica de una de las cápsulas de la Nakagin Tower de Tokio empujaron la reflexión sobre la protección del patrimonio moderno construido y también sobre la vivienda mínima, mientras que la instalación ‘Muga’, creada con las escaleras que utilizaron personas migrantes para rebasar la frontera de Melilla, promovió el debate sobre las profundas desigualdades existentes en el mundo actual, representadas, en este caso, por la crudeza de las fronteras humanas. Ambas instalaciones se convirtieron en auténticos iconos de la pasada edición de la bienal.

La exposición central de 2019, ‘Diseño de sistemas: la escuela de Ulm y la compañía Braun’, unió por primera vez a los tres archivos alemanes que guardan el legado de la escuela que influyó decisivamente en la refundación industrial, política y social de Alemania tras la segunda guerra mundial, y cuyos planteamientos intelectuales siguen teniendo una clara vigencia en el diseño actual.

Se conectó, desde sus dos sedes, San Telmo Museoa y el Instituto de Arquitectura de Euskadi, con la muestra paralela ‘Orain diseinua!’ de Tabakalera para mostrar cómo desde la arquitectura y el diseño se puede llegar a transformar una sociedad.

Mugak/ se asomó también a temas relacionados con la sostenibilidad medioambiental, social y económica, a debates contemporáneos y ha establecido vínculos con el mundo del arte y la cultura, para atraer a periodistas de renombre, artistas plásticos, diseñadores...

Por todo ello, el entonces comisario de Mugak/, Pedro Astigarraga, destacó que “la segunda edición, con un programa de gran solidez dotado de unos contenidos y unas actividades plurales y transversales, consiguió acercarse aún más a la ciudadanía”, y recalcó que “todo ello no hubiera sido posible sin las iniciativas y el esfuerzo de la treintena de entidades que colaboran con la Bienal”.

Astigarraga comentó también la gran aportación y dedicación de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la UPV/EHU, desde sus alumnos hasta sus profesores y responsables, “sin cuyo apoyo no hubiera sido posible la consolidación de la semana de las escuelas, que en la segunda edición creció exponencialmente”.

Durante dicha semana, celebrada del 21 al 25 de octubre, más de 600 estudiantes de arquitectura pertenecientes a siete escuelas: ETSA-EHU, eaT Toledo, A Coruña, Burdeos, Montpellier, Karlsruhe y Wroclaw dieron vida al eje de la llamada ‘Mugak Hiria’, en la Parte Vieja donostiarra, donde se ejecutó la intervención escultórica Islas Hub de Espacio Reflex y donde el alumnado de arquitectura realizó sus talleres, proyectos y trabajos, que han estado expuestos en el Baluarte del Mirador del monte Urgull.

“La creciente participación activa de las escuelas de arquitectura es uno de los objetivos estratégicos y vertebradores que reivindica Mugak/, como un proyecto a largo plazo”, subrayó el comisario.

 

Una treintena de colaboradores

Además de la UPV, la Bienal Internacional de Arquitectura de Euskadi, organizada por el Departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda del Gobierno Vasco, contó en 2019 con la colaboración institucional del Ayuntamiento donostiarra y la Diputación de Gipuzkoa, además de centros como el Instituto de Arquitectura de Euskadi (IAE/EAI), San Telmo Museoa, el Kursaal, el Guggenheim Bilbao, el Artium de Vitoria, el Museo Diocesano de Donosti o el Museo Cemento Rezola; entidades como el COAVN, el Archivo Peña Ganchegui, Maushaus, los clusters Habic y Eraikune, Baskegur, las asociaciones Atari, Áncora y Urbanbat, las galerías de arte Altxerri, Arteko, Ekain y Kur, además de Espacio Reflex, la Asociación Guipuzcoana de Amigas de Yoko Ono, el Taller y Dabadaba.

 

Algunas cifras de Mugak/ 2019

  • Más de 115 conferenciantes de Europa, América y Asia en 52 jornadas y conferencias
  • 20 exposiciones
  • 37 horas de talleres para personas adultas, jóvenes, niños y niñas
  • 600 estudiantes de Arquitectura de cuatro países diferentes

Más de 45.000 personas interesadas en las exposiciones, conferencias, proyecciones y los talleres de la segunda edición (en 2017 acudieron a las actividades cerca de 30.000 personas)



Estamos trabajando en la preparación del Programa